"Pasaba y pasaba como sus manos en mis piernas, subiendo, bajando... Entonces hacer el amor era eso, un pez negro pasando y pasando obstinadamente. Una imagen como cualquier otra, bastante cierta por lo demás. La repetición al infinito de una ansia de fuga, de atravesar el cristal y entrar en otra cosa.
-Quién sabe -dijo la Maga-. A mí me parece que los peces ya no quieren salir de la pecera, casi nunca tocan el vidrio con la nariz."
Hace un montón de tiempo que yo venía diciéndome a mi misma y escribiendo que no me quedaba mucho más. No sé, no creo mucho en el tema de las "premoniciones", pero de alguna forma presentí que algo se iba a romper, que iba a haber un quiebre muy importante en mi vida. Pensé otras cosas pero jamás imaginé que podía pasarme algo asi. Que le podía ver tan de cerca la cara a la muerte; porque sí, porque si Rodo se iba, yo me iba atrás de él. Y ahora entiendo todo, ahora aprendí en una semana más de lo que había aprendido en el resto de mis casi 17 años de vida. En fin, en estos días aprendí que todo es muchísimo más frágil de lo que parece. Que cualquier día, en cinco minutos se puede ir todo al carajo. Ahora, valoro lo que realmente importa en la vida. Y ahora entiendo muchas cosas que me dijiste, que antes no entendía.
