5.10.11

Tan perfecto que asusta.

Mierda que cuesta, che !
Me topé con un increíble, me quedé anonadada, no entiendo más nada.
Sieto que quiero ser sólo para que vos seas. Que quiero inhalar sólo lo que vos exhalás. Que quiero vivir y morir ahí, en tu sonrisa.
Cuesta.
Vos allá, yo acá. Estamos tan cerca, estamos tan lejos. Vos vas y venís. Yo voy y vengo. Y sos realmente tan lindo, sos tan perfecto, que asusta.
Después escucho sus voces, sé que me hablan, entiendo lo que dicen, pero no puedo responder. Alguien me pregunta qué pasó, otra voz me pregunta qué me hice. Es la misma que, segundos después, pregunta qué me tomé, con desesperación. Tal vez está gritando, pero su voz es tan pequeña, es tan lejana. Me levantan del suelo entre dos, creo, y ya estoy bien. Miro el mundo en vertical y todo parece estar un poco mejor, todo se va a componer. Me recuerdo a mi misma jugando en la calle de pendeja, tocando la guitarra en algún acto de la secundaria, cantando, me veo a mi misma rodeada de mis amigas o en tus brazos. Se mezclan muchas imágenes, pero me siento mejor, estoy mejor.
Y vos estás ahí, quieras o no, siendo real o sólo llevado por mi conciencia al lugar de los hechos, al momento y lugar donde necesito que estés. (Perdón por molestarte)
Sos tan perfecto, sos tan perfecto que asusta. Y cuesta, vos y yo sabemos cuánto cuesta, mejor que nadie más.
Acá estoy, o lo que queda de mi... para esperar.