30.5.12

Hoy pensé mucho en vos. 
Ya hace ocho meses y medio que nos dejaste y aunque a veces creo que me acostumbré a vivir sin tu presencia, me doy cuenta de lo contrario: te veo, te imagino por mi casa, tengo la sensación de que estás. 
No se por qué, pero me pasa. Me pasa que abro la puerta y te espero del otro lado. Me pasa que te necesito, que te extraño.
También me doy máquina y pienso que pude haber hecho más para salvarte, que te tomé como una carga más que como una compañía, o que pude haberte regalado mejores últimos días. Pero ya te fuiste (espero que no tan enojada conmigo como yo lo estoy) y no tiene sentido pensar en lo que pude haber hecho. Te cuento lo que puedo hacer ahora: pensarte, extrañarte y seguir queriéndote tanto como siempre te quise. 
Ocho meses y medio de que te fuiste, de que cerraste los ojitos al lado mío, mi amor. 




Pensando en vos siempre. Pensando en vos siempre, siempre extrañándote.