14.9.15

Adentro

Me muevo un poco pero basta para despertarte. Cuento los segundos: tus ojos van a volver y yo estoy ahí para verlo (privilegio). El perfume que ya es mezcla del tuyo y del mío, el ruido del silencio y de la paz, busco con mis manos las tuyas y en el medio me topo con acolchado, remera y mi pelo siempre revuelto. Otra vez privilegio, vas a darme el primer beso del día.