15.6.18

Si no fuéramos a vernos nunca más,
¿te daría igual? ¿Te despedirías de la misma forma cuando te vas? 
Te veo subirte a tu auto y pienso en el tiempo,
otro invento del hombre para autoflagelarse. 
El tiempo que pasó desde la última vez que te vi.
El tiempo que va a pasar hasta la próxima vez que te vea.
¿Me dirías lo mismo? ¿Me abrazarías?
Me encierro sin llaves en mi cucha, no necesito más nada.
Me siento llena por un rato hasta que la vida cotidiana me vuelva a vaciar.
No tengo un lugar
para ocupar
en tu vida.
No hay espacio, intento hacerme chiquita pero no lo hay.
Sin embargo te escucho atentamente, entre los sorbos a la birra, 
a ver si algo se te escapa, pero no.
Sólo me queda para mí, el resto de mi inmensidad.